Our Lady Immaculate Catholic Primary School

Sin compartir información sensible sobre el usuario, ¿puede explicarnos por qué el alumno estaba ausente?

“Debido al coronavirus, se recomendó que las personas extremadamente vulnerables desde el punto de vista médico permanecieran aisladas, lo que significó que uno de nuestros alumnos no pudo volver a la escuela tras la reapertura, hasta el 31 de marzo, cuando terminó el periodo de aislamiento.”

¿Cómo reaccionaron los docentes y compañeros a la presencia de AV1 en el aula?

“Al principio, la profesora estaba un poco reacia a usar una tecnología que permitiera que un familiar pudiera escuchar su clase. Algunas escuelas ya ofrecían clases en directo para el aprendizaje remoto y circulaban historias de padres que criticaban a los docentes. Presentamos AV1 al resto del alumnado utilizando el material que nos facilitaron, y los niños pensaron que era una idea fantástica. Disfrutaban pudiendo interactuar con su compañero desde casa.”

¿Cómo se utilizó AV1 en su centro?

“El robot se usó para que el alumno pudiera escuchar las explicaciones y participar en las discusiones en clase. También se utilizó en grupos pequeños con un profesor para realizar lectura guiada. No lo usamos en los recreos, pero podríamos haberlo hecho si el alumno no hubiera podido volver más adelante.”

¿Cree que AV1 influyó en la capacidad del alumno para involucrarse en la vida escolar?

“El alumno que usó AV1 tenía un diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista y no se implicaba con las tareas escolares durante el cierre del centro. Veía el hogar y la escuela como entornos completamente separados, sin puntos en común. Desde que introdujimos AV1, el cambio fue total. Participaba en las conversaciones, escuchaba las explicaciones y completaba las tareas asignadas. Este cambio se dio desde la primera clase en la que se usó el robot y se mantuvo hasta su regreso al centro.”

¿En qué momento vio el mayor impacto de AV1 en la escuela?

“Aunque solo llegamos a usar AV1 para apoyar académicamente al alumno, no cabe duda de que mejoró su bienestar y su capacidad para relacionarse con personas fuera de su núcleo familiar por primera vez en muchos meses.”

¿Cómo cree que AV1 afectó al bienestar del alumno?

“Además de lo anterior, le dio al alumno una razón para establecer una rutina, levantarse de la cama y participar en actividades con sentido. Creo que todos llegamos a comprender lo importante que es esto durante el confinamiento. Participar en las actividades le dio algo de lo que sentirse orgulloso.”

¿Tuvieron algún problema con el uso de AV1? ¿Cómo lo resolvieron?

“Tuvimos un pequeño contratiempo al principio: dimos el código de acceso al familiar (lo cual no debíamos haberlo hecho), y luego tuvimos que solicitar uno nuevo. Pensábamos que nuestro equipo informático tendría que configurarlo todo, pero en realidad, una vez instalada la app, fue muy fácil de usar.”

¿Algún otro comentario o consejo para otras escuelas que estén pensando en utilizar AV1?

“Nos fue muy útil asignar un alumno compañero al AV1 para asegurarnos de que estuviera cargado cada noche y colocado en su sitio cada mañana. Este compañero se sentaba junto al robot y avisaba al profesor cuando el alumno estaba conectado o levantaba la mano virtual para participar.

Obviamente, un caso de aislamiento médico o ingreso hospitalario es un uso ideal para esta tecnología, pero también lo habría encontrado útil para un alumno con ansiedad escolar.

El robot elimina barreras para el regreso a la escuela, porque supone un punto intermedio. Si el alumno cubre parte del contenido desde casa, se reduce la ansiedad por quedarse atrás respecto a sus compañeros. A veces el rechazo escolar puede estar relacionado con conflictos sociales que no se pueden resolver sin que el alumno esté en el centro, pero creo que AV1 podría utilizarse para fomentar la interacción social de forma segura y no amenazante.

Estoy segura de que hay muchos otros usos posibles si pensamos en alumnos actuales o pasados que hayamos tenido en clase.”

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